Aula Universitaria, N° 19, 1-10, ISSN: 1515-2500
Por Prof. Silbia Marisa Gómez
IES “Mercedes L. de Parra”
ASPECTOS PRELIMINARES:
El presente artículo, es resultado de una investigación que ha sido publicado en la Revista de la Universidad Nacional del Litoral (UNL), Aula Universitaria.
Teniendo en cuenta, los objetivos de la Revista Digital Pluriverso de difundir y comunicar los estudios vinculados a la implementación de nuevas metodologías pedagogías, entre otras temáticas, desarrolladas en los Institutos de Educación Superior de la Provincia del Chaco compartimos algunos de los principales aportes a fin de ampliar su alcance en la comunidad educativa. Cabe aclarar, que en caso de utilizar o citar el presente estudio recomendamos remitirse a la página oficial de la revista de la UNL, en la cual podrán acceder al texto original:
• DOI: https://doi.org/10.14409/au.v0i19
• Publicado: 2018-06-18
¿Qué es un café científico?
Un café científico es una reunión informal que se desarrolla en un lugar público (café o restaurant), donde los científicos invitados exponen un tema luego el cual se entabla un diálogo con el público asistente.
El público puede escuchar, consultar y discutir ideas de ciencia y tecnología en un ambiente informal, relajado
y respetuoso. En esta experiencia se optó por el modelo de café científico, con variantes adaptadas a la situación de aprendizaje que se proponía.
“Con este trabajo se pretendió apuntar a un tipo de aprendizaje por reestructuración conectando los materiales de aprendizaje con conocimientos anteriores”
La singularidad del café científico planificado: “algo habrán hecho por la ciencia” es que los científicos
(representados por los estudiantes), se sentaron con sus pares, profesores y público en general creando un espacio para conocer e interactuar de una forma grata y amigable.
Luego de una presentación breve y atractiva, se estimuló el debate de temas científicos.
Con este trabajo se pretendió apuntar a un tipo de aprendizaje por reestructuración conectando los materiales de aprendizaje con conocimientos anteriores, desde un marco teórico-metodológico TPACK como lo proponen
Koehler y Mishra (2006), para integrar las tecnologías a la educación. Esto nos permitió considerar las tres fuentes del conocimiento: la disciplinar, la pedagógica y la tecnológica, enfatizando en las nuevas formas de conocimiento que se generan en la intersección de unos saberes con otros.
Los distintos tipos de conocimiento se refieren a:
• Conocimiento disciplinar: conocimiento del contenido o tema disciplinar que se va a enseñar.
• Conocimiento pedagógico: conocimiento de los procesos, métodos o prácticas de enseñanza y aprendizaje. Así como también la organización de la dinámica del aula, el desarrollo e implementación de propuestas pedagógicas y la evaluación de su implementación.
• Conocimiento tecnológico: conocimiento sobre el uso de herramientas y recursos tecnológicos y el reconocimiento de cómo pueden facilitar la enseñanza y el aprendizaje.
La integración eficaz de la tecnología en el aula resulta de la combinación de estos tres conocimientos pero siempre teniendo en cuenta el contexto particular en que se aplica.
Metodología
La metodología elegida se basó en una estrategia participativa: la simulación de un café científico donde los
estudiantes a través de juegos de roles representaron a distintas personalidades de la ciencia relacionados con las teorías del origen de la vida.
“los estudiantes a través de juegos de roles representaron a distintas personalidades de la ciencia”
La clase se planificó en dos partes:
• La primera parte consistió en la exploración acerca de personalidades que aportaron a la problemática sobre el origen de la vida, para conocerlos y dimensionar el aporte que cada uno hizo a través de su labor como científico, recuperando información de sitios web, libros electrónicos, base de datos en línea, archivos de audio o multimedia. Con la información recopilada se elaboraron presentaciones multimediales grupales utilizando programas de presentaciones como Prezi o Power point que fueron compartidas y analizadas en clase. Para ello se habilito un aula virtual donde se trabajó en cuatro clases con actividades individuales y grupales. El aula contaba con: un espacio donde se presentaba la clase y las actividades, un foro para compartir trabajos y debatir temas planteados en el aula, archivo con material de consultas y mensajería interna.
• En la segunda parte se planificó y ejecutó el café científico que llevó por nombre “algo habrán hecho por la ciencia”. El mismo consistió en la presentación de científicos relacionados con el tema elegido. Los estudiantes protagonizaron los diferentes personajes originando un debate con participación del público concurrente. Para ello los estudiantes designaron: un coordinador general, los actores que interpretarían los personajes, decoradores, encargados de catering, presentador del evento, responsables de solicitar salón, musicalización, encargados de vestuario y maquillaje, encargados del registro del evento a través de fotos y videos, entrevistadores a actores y público.
Los recursos necesarios como guiones de cada científico y del presentador, diseño de invitaciones y banners para su difusión fueron diseñados y elaborados en talleres donde trabajaron organizados en grupos (figuras 1 y 2).
Una vez concretadas las etapas anteriores se realizó un ensayo general (figuras 3 y 4) en el cual se propuso una coevaluación que permitiera ajustar cuestiones que consideraran necesarias, luego del cual se presentó el trabajo en un salón de amplias dimensiones con la participación de estudiantes del profesorado y de escuelas asociadas ( figuras 5 y 6).
Se comenzó con la presentación de cada científico utilizando como soporte un power point que incluía una breve descripción de su biografía asignándole aproximadamente quince minutos para que cada personaje exponga.
Culminada la presentación de los científicos, se generaron debates entre estos y el público, teniendo como moderador el estudiante que actuaba como presentador.
En clases posteriores se analizó la experiencia desde la posición de estudiante y de futuros formadores como estrategia innovadora, que favorece el aprendizaje coo- perativo revalorizando las TIC como herramienta facilitadora en los distintos momentos de la propuesta, identificando aciertos y/o dificultades, proponiendo posibles cambios.
Por último con el material recabado durante las distintas etapas del trabajo se elaboró una síntesis para la difusión el evento a través de un medio televisivo local.
Conclusiones:
El pensar en el diseño de una propuesta que incluyera actividades significativas que se relacionaran con los contenidos curriculares y competencias propias de la disciplina nos llevó a pensar en un aprendizaje que pueda ser situado, contextualizado y, sin duda, un aprender haciendo.
“se puede decir que fue exitosa ya que traspasó las fronteras institucionales, espaciales y temporales de la educación tradicional comprobando que el hecho educativo puede ocurrir en cualquier lugar y en cualquier momento. Y las nuevas tecnologías pueden favorecer y potenciar estas situaciones.”
La sesión de café científico constituyó una experiencia pedagógica que propició la convivencia y el aprendizaje ubicuo del tema en cuestión en un ambiente informal, trascendiendo las características propias del aprendizaje
tradicional, generándose entornos de aprendizajes propicios para la expresión y la creatividad. Favoreció el reconocimiento y aprovechamiento de las diferencias de los estudiantes: los aportes que cada uno hace desde su experiencia personal y conocimientos, puntos de vista y perspectivas, para usarlas como recurso productivo en la conformación de un conocimiento colaborativo.
Si bien esta forma de trabajo demandó otro tipo de organización pedagógica del aula, otra forma de planificar y distribuir el tiempo; de vinculación entre docentes, estudiantes y conocimiento, generando cierta incertidumbre por el resultado a obtener e impaciencia por el tiempo que demandó, se puede decir que fue exitosa ya que raspasó las fronteras institucionales, espaciales y temporales de la educación tradicional comprobando que el hecho educativo puede ocurrir en cualquier lugar y en cualquier momento. Y las nuevas tecnologías pueden favorecer y potenciar estas situaciones.
En un principio el propósito fue favorecer el acercamiento de los estudiantes a la ciencia, en un ambiente lúdico, contribuyendo a la reflexión crítica y a la sensibilización de temáticas científicas y sus implicancias sociales y culturales. Pero trascendió lo propuesto ya que contribuyó también a la participación de docentes, estudiantes de otros niveles y público en general que participó de la experiencia.
Entonces, pensemos que si mejoraron los resultados del aprendizaje, si mejoró el vínculo entre docentes y
estudiantes, podemos concluir que la integración efectiva de las TIC en el aula, supeditada a las demandas educativas propias de la formación docente, a las necesidades pedagógicas, a los intereses de los jóvenes y a las tecnologías disponibles, genera puentes que facilitan el aprendizaje de los estudiantes permitiéndoles transitar su formación según sus propios ritmos de aprendizaje, fomentando aspectos comunicativos y aprendizajes en colaboración.
Descargar el artículo completo Revista Ed. 1 – N° 3-ARt 7 p29-35
